Beniarrés calienta motores y ya lo tienen todo preparado para las fiestas patronales
Dos semanas antes ya cuentan con una programación llena de actividades hasta el pregón de las fiestas
El mes de agosto es uno de los más especiales para Beniarrés, un municipio de la comarca de 1.100 habitantes. Este, durante cuatro días, deja de ser un pueblo tranquilo para convertirse en gozo de celebración y tradición con la acogida de sus fiestas patronales. Estas se celebran en honor a la Mare de Déu de la Cova Santa y transforman el pueblo para llenarlo de color, música, y visitantes de otros pueblos que también las quieren disfrutar tanto como los autóctonos, con el mismo espíritu de celebración. Estas, después de tantos años, son un símbolo de identidad, de unión y de orgullo.

Las fiestas, formalmente empiezan mañana, 14 de agosto, pero el ambiente empezó a respirarse dos semanas antes con la Semana Cultural, la cual ha cobrado protagonismo en los últimos años. Durante estas jornadas, Beniarrés ofrece un amplio abanico de actividades para todos los públicos: teatro, actuaciones musicales, monólogos, cuentacuentos, magia, ofrecida este año por el alcoyano Hugo Aracil, e incluso espectáculos con orquesta o comedia musical. Una de las actividades más queridas por los vecinos es la ‘globotà’, en la cual todos los vecinos se reúnen para hinchar miles de globos que decoran la localidad. Este año se ha batido el récord con 14.000 globos, 2.000 más que el año anterior, repartidos a lo largo de tres intensos días de preparación. “La globotà es una muestra perfecta de lo que somos: un pueblo que trabaja en equipo. Sin la ayuda de todos los vecinos, sería imposible organizar algo así”, explica el alcalde, Francisco Sellés.
Este año, la semana previa a comienzos de las fiestas patronales, se celebró, como novedad, una reunión muy especial. La Noche de Hermandad, una cena de hermandad el 8 de agosto, donde estaba previsto que estuvieran presentes personas que fueron afectadas por la DANA y que fueron ayudadas por voluntarios del pueblo. “Fue muy emotivo ver como la solidaridad generó lazos. Ahora vienen a compartir con nosotros esta fiesta”, cuenta el alcalde.
Estas, oficialmente empezarán el día 14 de agosto, con la llamada ‘Vespra’, arrancando así con el programa oficial. Los más pequeños disfrutan por la mañana de juegos de agua, mientras que, a las 21 horas empieza la entradeta de los Moros y Cristianos, donde desfilan las tres filaes locales: los Moros del Benicadell, los Guerrers del Cid y los Maseros. A continuación se realiza el pregón, el momento más esperado del día. Cada año se elige a una persona del pueblo que haya tenido un papel importante o que haya aportado algo destacable a este. En ediciones pasadas fueron pregoneras, figuras como Samantha, cantante de ‘Operación Triunfo’ o Lola, la librera del pueblo.
El pregonero o pregonera es secreto hasta que se realiza, sin embargo, el alcalde nos ha confirmado que este año vuelve a ser una mujer la figura que dará el pistoletazo de salida de las fiestas patronales.
El 15 de agosto es el día de la Virgen María de la Asunción, y marca el primer gran hito religioso y festivo. A las ocho de la mañana se realiza la diana para celebrar una eucaristía a mediodía, seguida de una traca en la Plaza. Por la tarde tiene lugar la entrada de los Moros y Cristianos para dar paso a la solemne procesión, que finaliza con una potente ‘mascletà’ y la actuación nocturna de la Orquesta Scream.
El sábado 16 se celebra Sant Roc, y los jóvenes de la misma quinta, o ‘solteros’, tienen un papel central en esta jornada. Son ellos quienes organizan y protagonizan gran parte de los actos de este día: desde la misa por la mañana hasta la comida de hermandad y la procesión posterior en honor al patrón.
La implicación juvenil es uno de los grandes orgullos del alcalde: “Estoy encantado con la participación de los jóvenes. Se lo toman muy de verdad, lo organizan todo con entusiasmo y lo viven con intensidad. Ese día son los protagonistas absolutos, también por la noche, cuando disfrutan de la discomóvil”. Además, durante el día también hay pasacalles, tracas y animación con charanga, que dan paso a la madrugada más ruidosa con la ‘Cordà’, una tradición que pocos pueblos de la comarca conservan.
El domingo 17 es el homenaje al Santíssim Crist de l’Empar. Se celebra con una misa solemne, traca, mascletà, y la popular embajada.
Por la noche, la procesión en honor a Cristo, lo orquesta Euforia y una nueva Cordà vuelven a llenar las calles de Beniarrés de emoción y pólvora.
El lunes 18, último día de las fiestas, está reservado para la patrona del pueblo: la Mare de Déu de la Cova Santa. Es, sin duda, la jornada más emotiva y multitudinaria. La mañana empieza con la misa solemne en su honor que acaba con una gran traca y acompañamiento de los Festeros en sus casas. Por la tarde se celebra la ofrenda floral, en la cual decenas de vecinos, y festeros rinden homenaje a la Virgen y en las 21 horas tiene lugar la gran procesión, uno de los actos más concurridos de todo el calendario. “En la procesión participan más de mil personas, y esto en un pueblo de 1.100 habitantes te da una idea de la cantidad de gente que nos visita”, comenta Francisco.
Después de la procesión llega uno de los momentos más esperados y emocionantes: el ‘Fervori’. El ‘retor’ sale al balcón del ayuntamiento para pronunciar un discurso en el cual se agradece en toda la comunidad su participación, y se entona el himno de la Cueva Santa. “Para cualquier persona de Beniarrés, este es uno de los actos más especiales. Es difícil no emocionarse”, asegura el alcalde. El broche final lo pone un castillo de fuegos, una mascletà nocturna, la actuación de la orquesta Montecarlo y la última Cordà de las fiestas.
Consciente de que son días de ruido, movimiento y ajetreo, Francisco lanza un mensaje claro a vecinos y visitantes: “A los de aquí, que disfruten, que tengan paciencia y vivan cada momento. Y a quienes vienen de fuera, que lo hagan con respeto y con ganas de pasarlo bien. Quién venga con otra intención, mejor que no venga”.
Así, un año más, Beniarrés se prepara para celebrar su historia, su tradición y su identidad. En estas fiestas patronales no hay duda que este pequeño pueblo sabe celebrar las fiestas cada año con más ilusión que el anterior.
