“Lo difícil es darse cuenta del momento en que hay que dar un paso al lado”
El exsecretario local socialista y actual concejal del Ayuntamiento de Alcoy tiene intención de dejar la primera línea política, tras casi dos décadas con responsabilidades en el partido y la administración

Jordi Martínez ha dejado la secretaría del PSPV-PSOE en Alcoy tras haber cumplido dos mandatos. Superado el ecuador de su cuarta legislatura municipal como edil en el gobierno –estuvo además una en la oposición– es hora de plantearse su futuro. Ha sido uno de los pesos pesados de la política municipal en todo ese tiempo y según revela, su intención es dar un paso al lado.
– Cuando acabe la actual legislatura, ¿va volver a su anterior puesto de trabajo en Correos?
– No sé profesionalmente qué va a pasar. Tengo opciones de volver y también, por edad, de acabar mi vida laboral. No sé todavía cual va a ser mi futuro ni en el trabajo ni en la política.
– Los políticos siempre dicen que están a disposición del partido. ¿Es su caso?
– Mi idea principal es dejar paso a otra gente. Con la decisión que he tomado podría haber otras expectativas en instancias de la administración, pero a día de hoy no tengo ningún proyecto que me ilusione o se me haya planteado. Lo difícil es darte cuenta cuándo es el momento de dar un paso al lado, porque quizá puedas ayudar más desde fuera que desde la primera línea política. Y eso es lo que voy a hacer. Ni tengo ansiedad por seguir en política ni tengo porque renunciar a ella.
– ¿No le atrae un cargo en la política autonómica o nacional?
– Ni me seduce ni me deja de seducir. Tengo una visión muy personal de lo que es la política y desde fuera quizá alguien crea que puedo aprovechar para alguna responsabilidad de este tipo, pero como he dicho no es una cuestión que me quite el sueño. Si creen que puedo ser válido en determinada responsabilidad, lo haré, pero repito que no es una cuestión que considere ahora mismo prioritaria.
– ¿Qué es lo que más le ha llenado tras esta trayectoria política y de responsabilidades en la política municipal? ¿Y lo que menos?
– Lo que más es el contacto con la gente. Tiene dos vertientes. Ir por Alcoy y que alguien te pare y te cuente que tiene un problema o una inquietud, es es muy bonito y si encima lo puedes resolver, maravilloso. También ese contacto personal, tal como está actualmente la política y la sociedad, tiene aspectos que no son tan gratificantes y es que hay personas que no tienen el más mínimo respeto a las personas. He tenido muchos críticos en las redes sociales. A algunos me he dirigido y he intentado quedar con ellos. Hablar con la gente, cara a cara, sin esconderse tras las redes sociales, te da la oportunidad de explicar las cosas. Muchas de las críticas que vienen por esos canales suelen ser despiadadas.
– ¿Ha complicado el mundo de la política la irrupción de las redes sociales?
– Las redes sociales son inevitables. Lo que es cierto es que llegamos tarde ya a todo. Ni podemos regular ni legislar, pero creo que han despersonalizado a la sociedad. He tenido muchos heaters a los que tuve que explicar que no existe ningún interés en generar problemas a la ciudadanía. Al contrario, lo que intentas es ayudar, escuchar… Pero no son las críticas, son los insultos, que duelen y afectan a todo tu entorno.
– ¿Y en qué medida ha influido todo esto en la decisión de dar un paso al lado?
– Lo de dar un paso al lado es debido a que entiendo que cada uno tiene su momento. En la política lo difícil no es entrar, sino saber dónde debes de estar en cada momento.
– ¿Cómo ve esa nueva etapa, cómo ve al PSOE y la política municipal?
– Hemos acometido un proceso interno que ha dado a Lorena Zamorano la secretaría local socialista y no puedo estar más que satisfecho. Es la primera mujer en el cargo, tiene una gran cualificación personal y profesional y un bagaje político importante. Hay gente que llevamos tirando de ese carro desde hace años y pienso que está bien que dejemos paso a otros que puedan empujar con fuerza.
– Los últimos meses no han sido fáciles, especialmente por el enfrentamiento abierto que se ha producido en el seno del partido. Imagino que no era lo que esperaba como final a una trayectoria al frente de la agrupación socialista.
– Hay gente que la conoces desde hace tiempo y sabes cómo funcionan. Hay otras de las que esperas más porque has compartido un tiempo de estar juntos… hay determinadas críticas que no acabo de entender, pero mayoritariamente yo me he sentido muy a gusto siendo secretario general del PSOE en Alcoy. Para mí es de los orgullos más grandes que he podido tener.
– En cualquier caso no es un futuro fácil el que se le presenta al socialismo alcoyano y en general.
– No lo ha sido nunca y tampoco ahora en estos tiempos. Pero también es cierto que la opción tanto en Alcoy como a nivel nacional tiene un respaldo importante de la sociedad. Son situaciones que no es la primera vez que pasan en este partido y siempre se han superado.
– ¿Ve al PSOE gobernando en Alcoy en la próxima legislatura?
– Si hacemos las cosas bien sí. El partido socialista tiene un bagaje en los últimos años de buena gestión. Somos el partido que más ha apostado por la ciudad a nivel de nuevas infraestructuras, de estar al lado de la gente, de tener nuevos proyectos empresariales, industriales… si somos capaces de tomar las decisiones adecuadas, estoy seguro que revalidaremos la confianza de la ciudadanía. Entre otras cosas, porque tampoco tenemos un Partido Popular en Alcoy que haya ofrecido ninguna alternativa.
– ¿Piensa que Lorena Zamorano será la nueva alcaldesa?
– Es una de las posibilidades. Tenemos un alcalde que ha hecho mucho por la ciudad y que es también un buen cabeza de cartel. Si no fuera él, Lorena sería la principal candidata. Cualquiera de las dos opciones tendrá a todo el partido empujando en esa línea.
– ¿Con el alcalde hay un distanciamiento especialmente a partir de ese proceso de renovación en la secretaría general del partido?
– Entiendo que no. Cuando uno acaba su mandato de secretario general, cada uno ve el futuro de su agrupación de una manera. Sí es cierto que el alcalde apostó más por la candidatura de Manolo Gomicia, desde la libertad y la confianza que nos tenemos. Pero distanciamiento, no. La libertad de pensamiento que pueda haber dentro de una agrupación es lo mejor que nos puede pasar, pero al día siguiente lo que hay que hacer es ponerse a trabajar todos por el partido y la ciudad con la misma fuerza e ilusión del primer día.