Cosa de todos

Parece que, por suerte, cada vez queda más lejano el estigma de la salud mental, de ir al psicólogo o al psiquiatra, y cobra más importancia tener en consideración esa salud mental de la que durante tantos años apenas se ha hablado, o cuando se ha hecho, no ha sido en absoluto de forma positiva.

La pandemia supuso un punto de inflexión en este asunto, puso de manifiesto la importancia de que la cabeza también estuviese bien, y que de no estarlo, no pasaba nada por ir a un profesional, igual que vas al médico si te duele algo.

Durante mucho tiempo, aquello que no se veía o no se palpaba –como puede ser cualquier trastorno o dolencia mental–, parece que no existía, tapando así una realidad que se destapó completamente hace relativamente poco tiempo.

Estamos en un momento en el que es demasiado habitual escuchar la palabra ansiedad, depresión…siendo esto solo la punta del iceberg de todo lo que hay detrás, porque hay mucho camino y recorrido hasta ponerle ese nombre.

Recursos como el SASEM o otros tantos con los que cuenta Alcoy relacionados con la salud mental demuestran esa creciente conciencia sobre su importancia, sin embargo, considero muy relevante trabajar y abordar la salud mental desde que somos pequeños.

En algunos casos se trata de tener herramientas para afrontar ciertas situaciones y que eso no derive en un problema mayor, ¿y si nos las dieran desde que somos niños? ¿Y si nos enseñaran a hacer frente a los problemas de forma adecuada?

Sé que la salud mental no es tan ‘simple’, que es algo que no es igual en una persona que en otra, pero también sé, que la salud mental, es cosa de todos.

SHEILA GARCÍA. Periodista

Advertisements