El corazón del motor late en Alcoy: emoción y velocidad para cerrar la temporada

La Plaza de España acoge, de nuevo, el parque de reagrupamiento del Rallye La Nucía-Mediterráneo "Trofeo Costa Blanca"

El rugido de los motores volverá a escucharse esta semana entre los barrancos, montañas y carreteras sinuosas del interior de Alicante. Del 6 al 8 de noviembre, el 31 Rallye La Nucía-Mediterráneo “Trofeo Costa Blanca” pondrá el broche de oro a la temporada del Supercampeonato de España de Rallyes de Asfalto (S-CER). Una cita decisiva, que recorrerá una treintena de municipios de las comarcas de l’Alcoià y el Comtat, y que convertirá a Alcoy en uno de sus escenarios más destacados.

La ciudad volverá a tener un papel protagonista al acoger, el sábado 8 de noviembre, uno de los parques de reagrupamiento del rallye. Según el programa oficial, los primeros vehículos llegarán a la Plaza de España alrededor de las 14:42 horas, ofreciendo a los aficionados la oportunidad única de ver de cerca a los coches, pilotos y copilotos que compiten por el título nacional.

Los participantes accederán a Alcoy desde el barrio del Viaducto, recorrerán la emblemática calle Sant Nicolau y se detendrán unos minutos en el corazón de la ciudad, en La Bandeja, antes de continuar hacia el siguiente tramo, el Penàguila-Relleu. Un escenario urbano que, una vez más, unirá la emoción del motor con la identidad alcoyana, haciendo vibrar tanto a vecinos como a visitantes.

El director de carrera y presidente del Automóvil Club AIA, Vicente Cabanes, destacó en la presentación que el rallye “recorrerá una treintena de municipios del interior alicantino, donde hay una afición enorme, pero también mucha implicación. Además del público, la zona aporta comisarios y voluntarios esenciales para una organización que supera las 800 personas”.

En cuanto a Alcoy, subrayó que “es un punto de encuentro ideal entre tramos, con tradición automovilística y una acogida siempre espectacular por parte del público”.

El Rallye La Nucía-Mediterráneo, que también es puntuable para el International Iberian Rally Trophy (IIRT) y los campeonatos autonómicos de la especialidad, llega este año cargado de emoción. Todo apunta a que en los tramos de l’Alcoià y el Comtat se decidirá el nuevo campeón del S-CER, dependiendo de lo que suceda en la prueba previa del Rallye RACC. Entre los inscritos figura el noruego Andreas Mikkelsen, uno de los grandes nombres internacionales, junto a los principales pilotos nacionales, que buscarán cerrar la temporada con un resultado memorable.

El concejal de Deportes de Alcoy, Alberto Belda, ha mostrado su satisfacción por repetir como ciudad anfitriona. “No es casualidad que el rallye pase por Alcoy un año más. La organización tiene raíces aquí, con el Automóvil Club AIA, y contamos con una afición muy importante. El reagrupamiento es una magnífica oportunidad para disfrutar del ambiente del motor y sentir la emoción de la competición muy cerca”, destacó.

Pero la cita también tendrá sabor local. Los hermanos Nicolás y Gonzalo Cabanes serán profetas en su tierra. Nicolás competirá al volante de un Renault Clio Rally5 dentro de la Copa Clio, de la que es uno de los pilotos más destacados. “Llegamos con opciones de ganar y muy motivados. Correr en casa siempre tiene un valor especial”, reconocía. Por su parte, Gonzalo pilotará un Suzuki Swift, con el que espera estar entre los primeros del campeonato autonómico: “Conozco bien los tramos y puntúa doble, así que buscaremos un buen resultado”.

Para los aficionados, el paso del rallye por Alcoy y las comarcas vecinas es mucho más que una competición: es un espectáculo de velocidad, destreza y pasión por el motor en un entorno de gran belleza natural.

Desde los tramos de montaña hasta los reagrupamientos urbanos, el Rallye La Nucía se vive a pie de carretera, entre el olor a gasolina y el eco de los motores retumbando en el paisaje. Este 31 Rallye promete ser una auténtica fiesta del motor. Y Alcoy, una vez más, será ese punto donde la emoción hace parada obligatoria antes de continuar el camino hacia la gloria.