La entrada sur se renueva para integrar la ciudad con el entorno del Molinar
La obra avanza a buen ritmo y ya deja entrever la transformación que vivirá el acceso desde Alicante
Quien circula estos días por la entrada sur de Alcoy puede percibir ya cambios importantes. Las máquinas de obra trabajan desde hace semanas en un tramo que, durante décadas, ha actuado como mero corredor de paso para vehículos que llegaban o salían de la ciudad. Ahora, ese mismo espacio encara una transformación profunda que aspira a convertirlo en una mejor carta de presentación de Alcoy, y que busca conectarlo con El Molinar, uno de sus enclaves históricos más singulares.
Durante la visita a las obras realizada por este periódico, los avances son ya visibles. Entre el movimiento constante de camiones, el desbroce de los márgenes e importantes tareas de desmonte, puede intuirse el futuro trazado de un corredor que reconfigurará por completo este acceso.
La actuación, financiada con fondos europeos Next Generation, cuenta con un presupuesto de 1.933.425 euros y un plazo de ejecución de seis meses. La adjudicataria presentó mejoras que permitirán reducir la duración prevista inicialmente en unas doce semanas, un aspecto especialmente relevante dada la sensibilidad del tráfico en esta zona.
El tramo en proceso de remodelación —695 metros de la antigua N-340, entre la rotonda del Molinar y la de la Font Roja— es un espacio estratégico. No solo canaliza buena parte del tráfico desde Alicante, sino que actúa como antesala del camino hacia el Conjunto Histórico del Molinar. Pese a ello, ha arrastrado durante años una imagen degradada: arcenes estrechos, escaso espacio para peatones y ciclistas, y un paisaje deslucido para quien entraba a la ciudad.
El nuevo proyecto busca revertir esta situación con una intervención que “otorgará un nuevo carácter a la entrada sur”, como destacó la concejala de Turismo y Fondos Europeos, Lorena Zamorano. La responsable municipal insiste en la idea de que el objetivo va más allá de una simple mejora vial: se trata de integrar mejor esta zona con la ciudad, hacerla más accesible y reforzar su dimensión paisajística, cultural y turística.
CORREDOR CICLOPEATONAL
El elemento vertebrador de la obra es la creación de un eje ciclopeatonal que permitirá, por primera vez, caminar o circular en bicicleta con seguridad desde el entorno de la rotonda del Molinar hasta la rotonda del acceso a la Font Roja. En cada sentido se ejecutará un carril bici unidireccional de 1,90 metros, acompañado de aceras más amplias y de un itinerario peatonal que discurrirá junto al cauce del río Molinar.
Este corredor supone un cambio sustancial en la manera de moverse por la zona. Actualmente, el tráfico rodado monopoliza el espacio, dejando escaso margen para quienes quieren desplazarse a pie o en bicicleta. Con la remodelación, la movilidad sostenible gana protagonismo y se refuerza la conexión con el entorno natural, lo que no solo mejora la experiencia de uso sino que aporta una nueva mirada a un tramo que tradicionalmente se ha percibido como meramente funcional.
Durante nuestra visita se apreciaban ya las primeras franjas de terreno despejado donde discurrirá el carril bici, así como la preparación para la instalación del sistema de alumbrado eficiente que iluminará tanto la vía ciclista como el recorrido peatonal. La red municipal de WiFi también se ampliará hasta esta zona, incorporando elementos propios de una entrada urbana moderna.
CONJUNTO HISTÓRICO
Una de las actuaciones más relevantes es la construcción de un nuevo ramal de 200 metros que conectará la rotonda del Molinar con el futuro acceso al conjunto histórico, declarado Bien de Interés Cultural. Este ramal incorporará zonas ajardinadas, plazas de aparcamiento y servicios urbanos básicos, abriendo la puerta a un proyecto de mayor alcance: la recuperación patrimonial y turística del Molinar.
Pocas entradas a Alcoy reúnen tanto valor simbólico como esta. El Molinar —cuna de la industrialización alcoyana— conserva ruinas, canales y edificaciones que conforman un conjunto único en la Comunitat Valenciana. Sin embargo, su accesibilidad y puesta en valor llevan años pendientes. El nuevo ramal permitirá canalizar visitas y abrir nuevos usos culturales y turísticos, una aspiración largamente planteada.
COMPLICACIÓN DEL TRÁFICO
La obra no implica el cierre completo del acceso, pero sí alteraciones puntuales. Este equilibrio, difícil pero necesario, ha sido una prioridad para el Ayuntamiento. La propia concejal Lorena Zamorano subrayó que se ha trabajado intensamente con la empresa para minimizar las molestias: “Somos conscientes de que generar incomodidades es inevitable, pero intentamos que sean las mínimas posibles”.
Las restricciones más significativas podrían llegar en fases finales, cuando sea necesario actuar en el eje central de la vía. Mientras tanto, el Ayuntamiento recomienda a los turismos utilizar otros accesos a la ciudad y reservar la entrada sur para vehículos pesados o aquellos que necesiten dirigirse a los polígonos vecinos.
>>Puede leer el reportaje completo en El Nostre del 12 de diciembre.