La polémica de la tumba de Camilo Sesto: una vergüenza para Alcoy

Esta semana Alcoy ha vuelto a ocupar titulares nacionales por un motivo del que ningún alcoyano puede sentirse orgulloso. Ha salido a la luz que el cementerio municipal fue utilizado como escenario para la grabación de escenas de una película pornográfica, concretamente junto a la tumba de Camilo Sesto, uno de los artistas más universales que ha dado esta ciudad. Aunque se ha aclarado que no hubo sexo explícito en dichas escenas, el simple hecho de permitir este rodaje en un lugar sagrado para muchas personas resulta profundamente ofensivo.

Lo más preocupante no es solo lo ocurrido, sino cómo ha sido posible. ¿De verdad nadie revisó el contenido del rodaje? ¿Nadie supervisó qué se iba a grabar ni dónde? La Film Office de Alcoy, de la que tanto presume el gobierno municipal, queda seriamente cuestionada. Da la sensación de que aquí cualquiera puede pedir permiso, mentir sobre el proyecto y grabar lo que quiera sin control alguno. Esto no es un hecho aislado, sino un reflejo más del desgobierno que sufre Alcoy bajo el mandato de Toni Francés, donde parece que ya no se respeta ni a los vivos ni a los muertos.

Más grave todavía es la reacción posterior. Han pasado varios días desde que unos vecinos hicieron llegar las imágenes polémicas y, tras manchar la imagen de Camilo Sesto, de su familia y de toda la ciudad —convertida una vez más en vergüenza nacional—, nadie del gobierno local ha pedido disculpas públicas. Lejos de asumir responsabilidades, se han limitado a echar balones fuera con una falta de pudor alarmante, y eso resulta indignante.

Cabe preguntarse entonces a qué se dedica la concejal de Turismo si no está pendiente de lo que ocurre en su concejalía ni de las autorizaciones que se conceden. Después de lo sucedido, queda claro que el cargo le viene grande, muy grande. Pero no nos engañemos: no pasará nada. Toni Francés jamás se atreverá a cesarla, no por falta de motivos, sino porque no puede permitirse implosionar aún más el PSOE local, ni siquiera cuando el nombre de Camilo Sesto ha quedado manchado.

Espero sinceramente que algo así no vuelva a repetirse. Desde la oposición tendemos la mano al gobierno municipal para mejorar la ordenanza de la Film Office; de hecho, ya hemos presentado alegaciones que actualmente están en periodo de revisión. Ojalá sirvan para evitar futuros bochornos.

Es una pena todo lo que está ocurriendo. Una pena la imagen que Alcoy vuelve a proyectar por culpa de este desgobierno. Solo espero que, si les queda un mínimo de empatía, pidan disculpas públicas. Alcoy y Camilo Sesto no merecen pasar por esto.

CARLOS PASTOR. Portavoz del PP en el Ayuntamiento de Alcoy

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