Alcoyano-Nàstic, un duelo de otra época

El Nàstic se presenta esta tarde (17 horas) con el atractivo de ver viejas caras conocidas

Ilaix Moriba perseguido por José Solbes.

Los duelo Alcoyano-Nàstic evocan a otra época, a esa Segunda B con un aroma distinto, más cercana y no tan fría como la actual. Era sinónimo de tarde grande de fútbol. Dos clubes con una historia muy similar –los dos han militado cuatro temporadas en Primera y han habido enfrentamiento entre ambos desde Primera hasta Tercera División– medían su orgullo, con un Collao, eso sí, lleno de público. Al Deportivo no se le ha dado mal el Nàstic en esta categoría. De sus ocho visitas, solo en una salieron perdedores los blanquiazules. Habría que remontarse a la temporada 92/93, hace 28 años nada menos, una eternidad.

El Nàstic se presenta esta tarde (17 horas) con el atractivo de ver viejas caras conocidas. Fran Miranda es uno de sus capitanes. Fichó tras unas duras negociaciones con el Hércules que no quería dejarle marchar. El mediocentro extremeño fue uno de los héroes del ascenso a Segunda División de hace diez años y una de las primeras peticiones de Toni Seligrat cuando llegó para salvar una nave a la deriva.

El de Torrent aterrizó hace temporada y media en el Nou Estadi de Tarragona con los granas terceros por la cola tras descender de Segunda. Levantó al equipo y tras poner su sello en la plantilla el pasado verano, lo llevó hasta el primer puesto del subgrupo A por delante de Barça B y Andorra. Además acabó como el equipo más goleador (35) y menos goleado (15). Muy fuerte en propia casa, donde terminó invicto, sufrió como visitante, donde solo ganó dos partidos y cedió sus tres derrotas de la primera fase.

Nadie duda de que mañana se verá a un Alcoyano muy distinto del que estuvo una hora sometido por el Barça B. Se espera un partido de pocas concesiones. “Hay muchas similitudes entre los dos equipos, la diferencia la marca el presupuesto de un equipo y otro. Si dejamos que se acerquen a nuestra área, el Nàstic es un equipo que te puede avasallar. Debemos ir con todo y hacer vibrar a los 150 aficionados como si fueran varios miles. Es nuestra responsabilidad”, aseguraba el viernes un Vicente Parras que pierde a Mourad por sanción pero que recupera a Jordán y Raíllo tras sus lesiones.

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