El Alcoyano deja de ingresar 400.000 euros en Copa del Rey

Enfrentarse a tres equipos de Primera División ha tenido un efecto relativo en las arcas por ser partidos sin público

El Athletic celebra uno de sus dos goles con la grada de Gol A sin público y una gran bandera. | XAVI TEROL

Si deportivamente el Deportivo ha alcanzado una repercusión nunca antes conocida en la historia del club con el brutal impacto a nivel mediático que tuvo la eliminatoria contra el Real Madrid, económicamente el efecto del paso por esta edición de la Copa del Rey ha sido relativo, incluso ínfimo si se tiene en cuenta las consecuencias que hubiera podido tener para una economía de guerra como la blanquiazul con público en las gradas.

Sin aficionados en el Collao por la pandemia la trascendencia en sus arcas ha sido relativa. El Alcoyano se ha quedado sin poder ingresar la principal fuente de beneficios que tienen los clubes modestos cuando en su camino se cruza un equipo de Primera División.

En el caso del Deportivo la alegría fue triple, se emparejó en la anterior eliminatoria con el Real Madrid, tuvo el aperitivo del Huesca y se enfrentó el jueves al Athletic, que diez días antes se proclamó en Sevilla campeón de la Supercopa tras deshacerse de Madrid y Barça. En ninguna de las tres eliminatorias –el partido se jugaba en el campo del equipo de inferior categoría– pudo abrir las taquillas y se jugó a puerta cerrada.

SIN FUENTE DE INGRESOS
Teniendo en cuenta que la recaudación por la venta de entradas es la principal fuente de entrada de dinero que encuentran los clubes de inferior categoría, se estima que el Alcoyano dejó de ingresar una cantidad cercana a los 300.000 euros –en el peor de los casos– y de más de 400.000 euros –en el mejor–. Los cálculos de la tesorería del club se sitúan en torno a los 400.000 euros.

Si se tiene en cuenta que el presupuesto del Deportivo esta temporada ronda los 800.000 euros, con estas tres eliminatorias frente a rivales de Primera –Huesca, Real Madrid y Athletic–, la tesorería del club ha dejado escapar una ocasión histórica para haber equilibrado sus cuentas e incluso ofrecer superávit.

Con este desconsolador panorama para una economía con tantas necesidades como la blanquiazul que cerró en septiembre pasado la era de Juan Serrano con un déficit superior al millón de euros, queda como único consuelo las cantidades que la tesorería del club percibirá por participación, una especie de pedrea para unas arcas que se hubieran llenado como nunca en otras circunstancias sanitarias.

Se trata del dinero procedente del plan de subvenciones que promueve la Federación Española de Fútbol a través del programa ‘Impulso 23’ con la que el estamento federativo trata de ayudar a los clubes de Tercera y Segunda B.

La RFEF ha establecido para este curso que cada club de Segunda B perciba una cantidad en torno a los 30.000 euros, para ser más exactos 29.750 euros, por cada eliminatoria disputada.

En el caso del Deportivo, al ser cuatro las rondas que ha disputado los ingresos se han elevado a 120.000 euros por este concepto.

A esta suma de dinero por eliminatoria superada se debe añadir las cantidades procedentes del programa de ayudas ‘Impulso 23’, que en el caso de los clubes de Segunda B puede elevarse hasta los 125.000 euros. No quiere decir que el Alcoyano vaya a percibir esa cantidad, podrían alcanzarla en base a unos requisitos y siempre y cuando los cumpla.

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