El Trabajo presenta la segunda edición del microteatro

La pandemia causada por el coronavirus en el 2020 no dejó indiferente a nadie. Arrasó con todo aquello que se ponía por delante y convirtió este mundo en un lugar más gris. Pero del mismo modo que se llevó muchas cosas, el arte y la cultura consiguieron hacerse un lugar y tratar de devolver al mundo entero la ilusión y la magia que habían desaparecido.

Así nació este proyecto de microteatro, el único en marcha en la Comunidad Valenciana actualmente. La necesidad de renovarse y reactivar el que ya se ofrecía desde la Sociedad El Trabajo hizo que se llevara a cabo la idea de crear un espacio para dar voz a una cultura más diversa que escapara del modelo clásico. Hugo Aracil, director creativo del microteatro, señala que uno de los objetivos era “tener un espacio que sea más creativo y que puedan entrar otros géneros teatrales”. Después de hacer una investigación escénica en Barcelona y conocer otros formatos, Aracil tenía claro que escapar del modelo de teatro tradicional podría tener buenos resultados, no solo en el presente, sino también de cara al futuro.

Con la ayuda de Ricardo Canalejas, director de El Trabajo, Enrique González, vicepresidente, e Isabel Balaguer, gestora cultural del proyecto, convirtieron esta sede en un microteatro. “El formato son obras de 15 minutos, en 15 metros cuadrados, para 15 personas”, apunta Canalejas. Sin embargo, las condiciones de la sala permiten ampliar su tamaño y y, por lo tanto, el aforo. “Si cerramos el salón por la mitad, tenemos una sala y si abrimos telón, tenemos otra un poquito más grande”, comenta Aracil.

Después del éxito y la buena acogida por parte del público en la primera edición que se celebró en mayo y junio de este año, recientemente se ha presentado la segunda edición. La programación ofrecida en esta ocasión se extiende desde el 19 de noviembre hasta el 10 de diciembre, con un contenido muy variado y para todos los públicos. Monólogos, espectáculos de malabares, magia, piezas teatrales y de comedia, demuestran la calidad artística que conforma el microteatro. Hugo Aracil explica que son los mismos actores y compañías teatrales quién, a través de la página web, expresan sus propuestas y el deseo de participar. “Antes de confirmar su asistencia, nosotros vigilamos que todo tenga un mínimo de calidad, porque el público merece irse de aquí satisfecho con aquello que ha visto”, señala Aracil.

ESPACIO PARA COMPARTIR
En este sentido, una de las particularidades que el equipo del microteatro destaca es la sinergia que se crea entre los profesionales del sector y los amateurs. La participación de actores profesionales y también la de gente que empieza a abrirse en este sector es aquello que enriquece este género de teatro. Así mismo, Canalejas explica que a los expertos les gusta ver que hay gente que les hará relevo cuando ellos se retiran. Y del mismo modo, aquellos artistas que empiezan ahora su camino, pueden aprender de la gente más experimentada; “que se puedan nutrir entre todos”.

Más allá de aprender entre compañeros, el director creativo señala que también funciona como un lugar de creación y, por lo tanto, de crecimiento profesional del artista, “un espacio laboratorio”. “Vienes aquí, expones tu obra, compruebas la reacción del público, y esto después puede servirte para hacer modificaciones o crear otras cosas nuevas”, detalla Aracil.

Aunque “parecía bastante difícil”, la idea inicial ya se ha hecho realidad. Ahora, entre los objetivos futuros, el equipo del microteatro expresa su deseo de que se convierta en un espacio profesionalizado con los materiales necesarios para que los más experimentados puedan trabajar con sus obras desde el crecimiento y desde la convergencia con todas las personas que forman parte del mundo artístico. “Ojalá esto se convierta en un lugar donde los profesionales de las artes escénicas de la ciudad de Alcoy tengan un espacio donde puedan crear y recrear esas obras que después llevarán a la parte de fuera”, manifiesta Aracil.