Las lluvias récord de la primavera condicionan la campaña anti incendios

Por un lado el terreno está húmedo pero, por otro, ha proliferado la vegetación y el monte se convierte en un temible conductor del fuego en caso de incendio

Las lluvias récord de la primavera
Dos voluntarios ambientales realizando labores de vigilancia en un paraje natural de Alcoy. ARCHIVO

Con la llegada de las altas temperaturas se activan todas las alarmas para proteger nuestros montes. Y aunque el éxito de la campaña de prevención de incendios va a depender de múltiples factores, este año encaramos el período estival con la teórica ventaja de que el monte está húmedo, y eso, según los expertos, juega a favor.

Y es que este 2022, las lluvias primaverales han sido muy abundantes hasta el momento –436 litros por metro cuadrado, según datos del pluviómetro del Círculo Industrial de Alcoy– y por lo tanto, lo previsible es repetir un verano como el pasado, en el que también veníamos de una primavera lluviosa, aunque no tanto como la actual, claro está. “No sabemos cómo se sucederá la campaña, porque tal y como está transcurriendo todo puede aún llover más, y esto implicará tener que desbrozar más, pero a la larga, ya que ahora está todo muy verde todavía. Es difícil hacer una previsión sin saber cómo va a comportarse el tiempo en las próximas semanas”, explica el concejal de Transición Ecológica, Jordi Silvestre.

No obstante, en las últimas semanas se vienen llevando a cabo labores de mantenimiento de sendas en zonas periurbanas, como la Font del Quinzet, Racó Sant Bonaventura, Molinar y Xorrador, entre otras, de cara a paliar los efectos de los temporales recientes.

Por otro lado, el Ayuntamiento de Alcoy ya ha puesto en marcha su maquinaria anti incendios, de cara a confeccionar su equipo de voluntariado ambiental, que estará compuesto por una treintena de personas. Ya está abierto el plazo para inscribirse y este año habrá cinco turnos durante el mes de julio y la primera semana de agosto. Silvestre detalla que los voluntarios realizan labores de vigilancia en los puntos fijos de Sant Cristòfol y Sant Antoni, como también se desplazan en bicicleta por todo el entorno natural.

A partir de julio, además, el dispositivo de vigilancia lo completan los voluntarios de la Agrupación Contra Incendios Forestales (ACIF) y Protección Civil, reuniendo a un centenar de personas en total.

Por su parte, Ibi también ha iniciado su campaña de voluntariado ambiental, con la que volverá a reclutar a cerca de 70 efectivos que integran el equipo de vigilancia de su término municipal. El objetivo es concienciar a los ciudadanos de la importancia de tener actitudes cívicas y mostrar que resulta necesario comprometerse personal y colectivamente para evitar conductas de riesgo y prevenir incendios forestales.

Con todo, hay que recordar que la alerta se activa cada año en junio, coincidiendo con el inicio de la prohibición de quemas agrícolas por parte de la Generalitat Valenciana, que se prolongará desde este miércoles hasta el 16 de octubre. Desde el año 2017 se viene ampliando este período, una medida que responde a las especiales condiciones de peligro de incendios forestales que estos últimos años viene mostrando el mes de junio, con temperaturas, algunos días, especialmente altas. Este año, de hecho, ya hemos sufrido la primera ola de calor de la temporada, pese a estar aún en mayo.

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