Muro y Cocentaina, a la espera de las nuevas infraestructuras educativas

Los municipios de las comarcas de l’Alcoià y el Comtat vivieron el pasado miércoles 8 de septiembre una vuelta al cole marcada por la normalidad en una jornada que transcurrió sin incidentes y que volvió a estar marcada por la aplicación de los protocolos anticovid que tan bien funcionaron en los centros educativos durante el pasado curso. Ilusión, nervios, alegría e incluso lloros, en aquellos que iban a clase por primera vez, fueron en su mayoría las sensaciones que experimentaron los estudiantes de Ibi, Castalla, Onil, l’Alqueria d’Asnar o el CRAI Mariola-Benicadell que aglutina a las localidades de Alfafara, Agres y Gaianes.

EL NUEVO BOSCO
En Cocentaina fueron unos 1.300 los alumnos que regresaron a las aulas en los colegios Real Blanc, San Francisco de Asís, el IES Pare Arques y el San Juan Bosco.

Como principales novedades para este curso destaca que el Real Blanc ofrece un nuevo grupo de escolarización de dos años al mismo tiempo que la Escuela Infantil Municipal San Hipólito cuenta con un aula para pequeños de 1 a 2 años así como dos aulas para los de un año más. Asimismo los estudiantes del Bosco II han vuelto a comenzar las clases en el Aulario que el Ayuntamiento habilitó el pasado año en el antiguo Instituto, junto a la FPA Beniassent, mientras duran las obras del nuevo colegio que permitirá la unificación de un centro educativo que desde hace más de tres décadas está dividido en dos inmuebles.

Precisamente las obras del futuro cole avanzan a buen ritmo y ya se vislumbran los pilares que sustentarán la estructura de las dependencias que albergarán el nivel de Infantil “arranca un curso lleno de aprendizajes que acrecentará la capacidad de adaptabilidad que ya demostraron el curso anterior. Este curso es una nueva oportunidad y estoy segura que lo aprovecharemos”, afirmaba la alcaldesa y edil de Educación, Mireia Estepa.

EL BRACAL DE MURO
En Muro el curso arrancó también con máxima normalidad y más de 1000 estudiantes, aproximadamente, retomaron sus clases tal y como confirmaron desde el Ayuntamiento del municipio.

Los alumnos se reparten por el IES Serra de Mariola así como los Colegios Montcabrer y Bracal. En este último se abre una etapa de esperanza ya que las obras del futuro centro educativo han avanzado considerablemente en los últimos meses y si todo va según lo previsto “el curso 2021/2022 podría ser el de la inauguración de las nuevas instalaciones. Nosotros mantenemos contacto directo con la Conselleria de Educación, que a su vez está pendiente de la empresa que ejecuta los trabajos, ya que queremos que no haya más demora y que nuestros pequeños dejen por fin los barracones en los que están desde hace más de diez años para tener el colegio que merecen”, destacaba la edil de Educación, Xelo Cascant.

La vuelta al cole también estuvo marcada por la puesta en marcha del nuevo Transporte para Estudiantes de la Mancomunitat de l’Alcoià y el Comtat, un servicio que a partir de ahora también acercará a los alumnos hasta los centros FP de la comarca en los que cursan sus estudios en esta última modalidad.

NORMALIDAD EN BANYERES
La normalidad ha sido la nota predominante del inicio de curso en los centros educativos de Banyeres de Mariola. En el colegio Alfonso Iniesta, a diferencia del año pasado, se ha contado con una dotación extra de tres nuevos profesores, lo que permitirá desdoblar los grupos más numerosos y conseguir que las aulas no superen la ratio de 20 alumnos. Desde este centro se ha destacado que los alumnos entran de forma escalonada y relajada, teniendo un tiempo de 15 minutos para hacerlo para evitar aglomeraciones y que la salida se realiza de idéntica manera, intentando que el tránsito de alumnos sea lo más ligero posible, una situación que de forma parecida se practica también en el colegio de la Fundación Ribera, desde donde se destacaba que la actividad docente ha comenzado con total tranquilidad y con completa presencialidad en todos los cursos.

De igual manera la normalidad ha sido la tónica predominante en el IES Professor Manuel Broseta, donde la presentación del alumnado fue el miércoles y el jueves, de forma escalonada, mientras que el viernes todo el mundo acudió a clase a las 8 de la mañana iniciándose la actividad docente con absoluta naturalidad y orden.