Ni ángel ni demonio

Alcoy es esa ciudad donde nací y a la cual siento que pertenezco. No es un lugar, es una forma de mirar la vida. Ese lugar del mundo donde cada piedra lleva el calor de la historia. Caminar por la ciudad es escuchar voces de aquellos que se han ido pero que han dejado un legado. Fachadas que han visto la guerra, revoluciones, fiestas, paseos y besos a escondidas. Fábricas de cuyas chimeneas ya no sale humo pero que todavía huelen a trabajo.

Porque Alcoy fue industria, fue modernidad. Ciudad valiente, de grandes artistas y si somos conocidos por todo el mundo, uno de los que más culpa tiene es Camilo Sesto.

Nuestro gran estandarte que todavía está a la espera de ver como abren las puertas de su museo. Y ya han pasado seis años, a este paso cuando vayan a inaugurar el museo ya no quedaran seguidores del artista, al menos de su época. Espero que tengamos memoria de quien fue porque el que tiene memoria tiene alma. Aquí el alma vale más que un título y la mirada más que un discurso. Pueblo que inventa y se reinventa, trabajadores con iniciativas y uno de ellos fue un muchacho que era diferente a todos. Nuestro Camilo Blanes, el Camilo Sesto del mundo. Ese artista mezcla de humildad y grandeza, nostalgia y coraje.

Camilo, ni ángel ni demonio, como bien titulaba en su buen libro Ramón Climent. Cantaba al amor con la misma pasión que el alcoyano siempre ha mirado hacia adelante. Una estrella que antes fue niño, caminó por estas calles, respiró este aire, oyó el repique de las campanas del campanario y esas cosas no se pueden borrar. Al volar tan alto se le veía raro, pero eso también es muy alcoyano, soñar cuando nadie lo espera. Alcoy es ciudad de soñadores discretos. Y aunque Camilo se fue, nunca se fue. Todavía resuena su música, Alcoy no olvida. El que canta con el alma se le guarda un sitio. Y al que se fue lejos, pero vuelven sus canciones, se le abre la puerta. Y esperamos que se abran pronto las puertas del ansiado museo y que sea como él se merece.

Así que esperemos que los responsables de hacer felices a los alcoyanos, a los fans de todo el mundo de nuestro artista no demoren más la apertura de esas ansiadas puertas.