Un derbi, también en los banquillos

Montava y Diego Jiménez, dos históricos del Alcoyano, ahora dirigen a Contestano y CFC C. Alcoy

Diego Jiménez se estrena en el banquillo del CFC y Montava cumple su quinto curso en el Contestano. | D.V.

La historia reciente del Alcoyano no se entendería sin dos jugadores formados en la casa que entre ambos suman la nada despreciable cifra de 521 partidos oficiales con la camiseta blanquiazul. Uno, que luce la inseguridad y los temores de un recién llegado, formó parte de aquella plantilla que logró la gesta de retornar 42 años después a la Segunda División. El otro, más cuajado camino ya de su séptima temporada y que afronta su reto más importante como entrenador, fue uno de los mayores talentos que ha forjado la cantera del Deportivo.

Curiosamente nunca compartieron vestuario, sí fueron rivales en el terreno de juego, algo que volverá a suceder esta tarde (17 horas) en La Vía de Cocentaina, donde sus equipos, Contestano y CFC Ciudad Alcoy, se verán las caras en un derbi que promete lucha no solo en el terreno de juego, también en los banquillos.

ADMIRACIÓN MUTUA
Ambos se profesan admiración y mucho respeto por su pasado futbolístico. Diego Jiménez (41 años) no duda en asegurar que “para mí Montava, fue un ídolo. Al ser un jugador del centro del campo me fijaba mucho en sus movimientos. Era una delicia verle jugar. Aún recuerdo sus formidables desplazamientos del balón, eran únicos”.

Montava, o Monti como muchos le conocen, no ahorra tampoco elogios para quien a su entender “ha sido uno de los jugadores más importantes que ha dado Alcoy. Su palmarés es increíble. En la última época tenemos a Jorge Molina, después está Juli y en el tercer lugar situaría a Diego Jiménez, con varios ascensos, entre ellos uno a Primera con el Eibar. Pero sobre todo destaco de él que es una excelente persona, con la que se puede hablar de fútbol y lo que haga falta”.

Hoy esas flores se tornarán seguramente en miradas desafiantes. Entre ambos clubes se ha entablado una rivalidad, reciente eso sí, pero con algunas cuentas pendientes. Sin ir más lejos aún se recuerda la visita del año pasado a Cocentaina, donde el CFC Ciudad Alcoy se llevó un empate con un gol con la mano de Santi Moltó. Un empate que escoció y mucho en el bando rojillo.

Esta temporada, el Contestano ha reforzado su ataque con Diego Vicedo, que era una de las banderas de los rojinegros desde su creación hace cuatro temporadas. “Va a ser un partido muy bonito, pero un derbi es un derbi y nunca se sabe. Por plantilla e inicio de temporada quizás nosotros seamos los favoritos, pero luego en el campo somos 11 contra 11 y aquí nos conocemos todos. Lo que tengo claro es que no va a ser nada fácil, que hay que jugar el partido. Aún recordamos el gol de la pasada temporada, es un cuenta que tenemos pendiente con ellos”, argumenta Montava esbozando una pícara sonrisa.

Su equipo anda desbocado en este inicio de competición. El Contestano marcha líder de su grupo en Primera Regional con 16 goles a favor por ninguno en contra.

En el otro bando habita un recién llegado, un Diego Jiménez que acaba de estrenarse en un banquillo, que reconoce que muchas veces se despierta a media noche pensando “en tal jugador o en aquella jugada para mejorar”.

El CFC Ciudad de Alcoy ha dado una de cal y otra de arena. Se aplazó el primer partido de liga contra el Pinoso por el virus, después cayó 2-0 en Moixent y le ganó 1-0 al Rayo Ibense B la pasada jornada. “Quiero ir poco a poco, dando pasos seguros y poner orden en un equipo que es prácticamente nuevo y muy joven. El fútbol es tan bonito que no siempre gana quien más presupuesto tiene. Lógicamente nosotros no tenemos el potencial del Contestano pero trataremos de hacerles daño con nuestras armas. Ellos son los favoritos y nosotros vamos a este derbi con la ilusión de sacar algo positivo y seguir mejorando como equipo. Creía que iba a ser una categoría en la que se juega al patadón, pero me ha sorprendido y son muchos los equipos que buscan jugar desde atrás el balón, entre ellos el Contestano”.

Puede leer el artículo completo en la edición de El Nostre del sábado 7 de noviembre.

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