Un estreno entre silencios

La cubierta de la pista exterior, una de las obras más ambiciosas en materia de infraestructura deportiva, se inauguró sin ningún acto oficial

La puesta en largo de uno de los proyectos más ambiciosos y difíciles de ejecutar se llevó adelante en el más absoluto de los silencios, como si nada hubiera ocurrido, cuando realmente fue una matinal muy importante para el deporte de nuestra ciudad que no solo ha visto como la fisonomía de su instalación más emblemática, ha ganado en espectacularidad con esa mole pesada de hierro que ahora cubre la pista exterior del polideportivo Francisco Laporta, sino que una instalación que hasta ahora se utilizaba dependiendo de la climatología, ahora podrá usarse durante todo el año, además con vestuarios propios.

Toda una bendición para deportes como el hockey y el patinaje artístico, que en principio serán las disciplinas más beneficiadas por la ejecución de un proyecto que ha pasado de puntillas en su tramo final y del que se ha echado en falta una inauguración acorde a la magnitud del proyecto. Los grandes favorecidos de este momento fueron los chavales del Judo Club Alcoy, que tuvieron el honor de ser los primeros en poner pie y disfrutar de la renovada e imponente instalación. Sobre 130 judokas participaron en la jornada de Jocs Esportius y exámenes de pase de cinturón que convirtieron la pista exterior en un hervidero de deportistas y familiares.

Detrás han quedado muchos años de promesas y algo más de un año de obras. El punto de partida fue enero de 2020. En un principio se habló de un plazo de ejecución de cuatro meses, que finalmente se ha alargado a más de un año debido a la complejidad del proyecto y a las numerosas dificultades que se han ido salvando durante el camino recorrido.

Entre ellas, la pandemia, que obligó a paralizar las obras un par de meses. Entonces se habló de una inauguración a finales de año, más tarde se dejó para principios de 2021 y fue en abril pasado cuando finalmente terminaron. En su momento fue Castulo Techonology la empresa elegida entre cuatro candidatas para ejecutar el proyecto por un importe de 250.246,15 euros. La cubierta metálica se sostiene sobre cuatro pilares de hormigón armado. En todo momento se garantiza un galibo superior a los 5 metros bajos los elementos estructurales en el área de juego. En total la superficie construida es de 1.056,51 m2.

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