Nuevo reparto del botín. FERNANDO MERLO GONZÁLEZ

A lo largo de la historia podemos encontrar numerosos ejemplos en los que clases dirigentes enfrentadas se ponen de acuerdo para no perder poder social, político, y sobre todo, económico.
Las élites hispanovisigodas y las nuevas de origen musulmán que llegaron en el siglo VIII a la Península Hispánica en muchos casos pactaron, y así, conservaron o conquistaron parte del poder social, político y económico de Al-Ándalus, al menos, en un principio.
En la España del siglo XIX convivieron durante decenios la vieja aristocracia procedente del Antiguo Régimen con la nueva burguesía en ese orden liberal “made in Spain” que se estableció en nuestro país.
En los años setenta del pasado siglo las clases dominantes del franquismo cedieron el poder político “voluntariamente”. A estas alturas, ¿hay alguien que dude que lo hicieron para conservar parte del económico?
Que las élites pactan, es un hecho. Y que lo hacen para mantener sus privilegios y sin importarles lo más mínimo el pueblo al que dicen servir, también.
En las últimas semanas los medios de comunicación se han hecho eco de un posible pacto entre el PP y CiU. A cambio de la aceptación por parte del PP, es decir, el Gobierno del Reino de España de 23 puntos planteados por la coalición nacionalista, éstos no realizaría la consulta soberanista del 9N. El PP se erigiría en defensor de la Constitución y la españolidad, y CiU, nuevamente conseguiría privilegios para los dirigentes catalanes. Ambos partidos podrían vender, una vez más, entre sus respectivos votantes una “victoria” política. Últimamente ya no se habla de estos “puntos”, pero si no son éstos serán otros, al final pactarán, así llevamos décadas.
A estas alturas se puede y se debe dudar sobre la honorabilidad de estos “pactos”, yo lo hago. Puede que durante La Transición, algunos políticos, los realizaran de buena fe, con ánimo de concordia y consenso, buscando la convivencia, pero ¿qué queda de eso hoy día? Pienso que de lo que tratan es de pactar para mantenerse en el poder, pactar para continuar con el control político, económico y social del país al que dicen servir. Creo que a ninguno le importan ni lo más mínimo lo que dicen defender; hablemos claro, a parte de los dirigentes del PP se la repampimfla España y a parte de los de CiU Cataluña, lo que quieren sus clases dirigentes es poder seguir controlando parcelas de poder, poder seguir saqueando a los ciudadanos y a las ciudadanas españolas (incluidos los catalanes y catalanas), para después repartirse, una vez más, el botín.