Compromís de Banyeres aprueba en solitario un presupuesto de 11,6 millones

Compromís aprobó en solitario los Presupuestos 2020 del Ayuntamiento de Banyeres de Mariola que este año ascenderán a 11,6 millones de euros, buena parte de los cuales se consignan en los capítulos destinados a inversiones, que totalizan 4,9 millones.

La portavoz del Equipo de Gobierno, Lorena Ferre, defendió el “rigor” aplicado en el control presupuestario del gasto y la atención especial brindada a las dotaciones asignadas a la educación, a la cultura, al deporte y al bienestar social, subrayando, de forma especial, este último aspecto.

Ferre dijo que el documento se asentaba sobre los mismos “pilares básicos” que habían caracterizado a los presupuestos de ejercicios pasados: “estabilidad presupuestaria, sostenibilidad financiera y un carácter social y participativo”, y destacó la importancia de los capítulos destinados a inversiones, muchas de ellas basadas en aportaciones previstas por organismos como la Generalitat o la Diputación. Explicó, respecto a las inversiones, que, como el año anterior, se había incluido la obra de construcción de un nuevo aulario, previsto dentro del plan “Edificant” de la Generalitat con más de 3 millones de euros.

El PP, que votó en contra, dijo a través de su portavoz, José Carlos Molina, que no se habían aceptado ninguna de las cerca de 14 medidas planteadas por su grupo, a lo que contestó el Alcalde, Josep Sempere, diciendo que se les pidió que fueran “valoradas” económicamente, extremo que no tuvieron en cuenta. También pidió un “plan integral para el Polideportivo”, a lo que el Alcalde rebatió que esta acción cuenta con un proyecto preparado y listo para ser presentado al próximo Plan de Obras y Servicios de la Diputación. Recordó que hace un año fue retirado, con el consenso de los grupos políticos, para poder destinar la ayuda prevista para esta obra a construir un nuevo Centro de Alzheimer.

El portavoz Popular lamentó que muchas partidas presupuestadas estuvieran condicionadas a la obtención de ayudas. Dijo que si no se obtenían no se llevarían a cabo, mostrando su desacuerdo ante la economía “saneada” que presentaba el consistorio. El Alcalde le explicó que el superávit sólo podía utilizarse para realizar obras sostenibles, dentro de los límites que marca el Estado.

Molina acusó al Equipo de Gobierno de que la ejecución de obras como el aulario se harían coincidir con el final de la legislatura al ser año “electoral”. Esta intervención fue respondida por el Alcalde que los plazos los marcaba la Generalitat en función de la disposición presupuestaria y que, seguramente, “no lo vería como Alcalde”. Añadió que el proyecto del Aulario se remontaba a muchísimo tiempo, con gobiernos del PP, y que “sólo ahora” se veían posibilidades de que se ejecutara, que era lo que “realmente importaba”.

Desde el PP se pidió la redacción de un nuevo plan de ordenación urbana ante el hecho de que muchas empresas estaban buscando terreno industrial fuera de Banyeres. Fue contestado indicándose todo lo contrario: que “sí había terreno industrial” y que en estos momentos existía “iniciativa privada” para desarrollar nuevas zonas para albergar empresas.

Por su parte el PSOE, que se abstuvo en la votación, opinó que el incremento de la cifra del total del presupuesto, respecto al de 2019, era consecuencia del aumento del gasto corriente, calificando el presupuesto de “continuista”. Pidió más control y fiscalización en lo relacionado a las tasas e impuestos sobre obras, lo que podría aumentar los ingresos por este concepto, a lo que se le indicó que las previsiones fijadas eran consecuencia de la evolución producida durante el último año. Su portavoz, Fernando Sempere, solicitó también que se rebajara el Impuesto de Bienes Inmuebles, dada la buena situación económica por la que atravesaba el consistorio.

Foto: El ayuntamiento de Banyeres de Mariola acogió el pleno en el que se aprobó el presupuesto municipal

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