El Winter Black Festival reúne a casi 500 participantes a partir del jueves

Bailarines, profesores y músicos llegados a Alcoy procedentes de media Europa

El Winter Black Festival reúne
Baile social en la Glorieta durante la edición pasada del festival. ARCHIVO

Desde este jueves y hasta el próximo domingo 5, la ciudad volverá a recrear los maravillosos años 20 de la mano de la asociación de amantes del swing Little Black Alcoy, que organiza la octava edición de su Winter Black Festival. Profesores de primer nivel, los mejores músicos del género y bailarines llegados de distintas ciudades de Europa, llenarán Alcoy con el mágico ambiente que proporciona el swing.

Pilar Molina, presidenta de Little Black, ha explicado que el festival consta de talleres y actividades exclusivas para los participantes, además de dos eventos abiertos al público en general, el primero, un concierto de jazz a cargo de Swing 26 en el Sport Passion (viernes, 20’30 horas), así como un tardeo con DJ Battle, el sábado a partir de las 17’30 horas, en el Parterre 9. También se llevarán a cabo los habituales bailes sociales el sábado y domingo a mediodía, en la Plaça de Dins y la Glorieta, respectivamente.

Desde la organización explican que de momento hay inscritas 435 personas y esperan alcanzar la cifra de 500 participantes, la mayor parte venidos de distintos puntos de la geografía española, Irlanda, Alemania, Francia, Austria, Hungría y Eslovenia, entre otros. “Tenemos la suerte de contar con un festival referente que está al nivel de las capitales”, remarca Hermes Vélez, que aprovecha para invitar a los alcoyanos a participar.

En este sentido, desde la organización aclaran que no es necesario saber bailar para inscribirse en el festival y habrá clases de iniciación de lindy hop para principiantes. Toda la información, la programación detallada y las entradas, están disponibles en la web www.winterblackswingfestival.com.

Un año más, The Mussol Jazz Club colabora con el festival, que además cuenta con el apoyo del Ayuntamiento de Alcoy. El concejal de Cultura, Raül Llopis, resalta que se trata de una cita ya consolidada dentro de la programación de la ciudad, a la vez que reitera la “apuesta” del Consistorio por este festival, del que destaca su contribución como “polo dinamizador” de la economía local, dada su repercusión para bares, restaurantes y establecimientos hosteleros en general durante cuatro días.

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