Las lluvias torrenciales de la pasada semana causaron algunos daños

La comarca sufrió la pasada semana un episodio de fuertes lluvias que hizo que se acumulasen cantidades importantes en pocas horas, como en el caso de Alcoy. Según datos del pluviómetro del Círculo Industrial, en total se recogieron 56,2 litros por metro cuadrado en los cuatro días que registraron precipitaciones entre el sábado 8 y el jueves 13.

Especialmente virulento fue el chaparrón que descargó sobre la ciudad, acompañado de granizo en algunas zonas, el lunes 10 por la tarde, que dejó 24 litros por metro cuadrado en menos de una hora. Muchas calles se convirtieron rápidamente en verdaderos ríos, produciéndose numerosos arrastres de tierra, y puentes como el de Cervantes ofrecieron espectaculares imágenes, con el agua formando grandes cascadas.

Una de las incidencias más destacadas afectó al pabellón Miguel Sarasa del polideportivo Francisco Laporta, que se inundó en la tarde del lunes. Pero según han informado fuentes municipales, el pabellón no se inundó por problemas de goteras, lo que pasó fue que una tubería situada en uno de los extremos del recinto, dentro de la instalación, se saturó con el granizo y la gran cantidad de agua que llovió en poco tiempo, lo que provocó su rotura.

Las brigadas de Obras y la del Polideportivo actuaron con rapidez y completaron la reparación en menos de dos horas, de modo que por la noche ya estaba la pista sin agua, pudiendo hacer uso de ella al día siguiente.

El concejal de Deportes, Alberto Belda, ha lamentado que el PP denunciara la situación a través de las redes sociales achacando la situación a la falta de mantenimiento de la instalación, en concreto, al mal estado de la cubierta del pabellón.