Los nuevos tiempos del CTM Alcoi

Tuvo que renunciar a jugar en Primera División y está tercero en Segunda

El CTM Alcoy-Taia venció de manera contundente en la última jornada a La Pobla de Vallbona. Foto: Lucio Abad.

Hubo un tiempo en el que el tenis mesa era toda una potencia no solo a nivel provincial y autonómico, también nacional. Había equipo masculino y femenino en la máxima categoría y jugadores y jugadoras locales formando parte de la Selección Española.

Fue una época dorada que logró mantenerse en el tiempo, hasta que llegó el declive, en parte porque las obligaciones profesionales de sus mejores jugadores hacían inviable dedicar más tiempo a un deporte en el que cuesta dinero del bolsillo y sacrificar muchos fines de semana a la vida familiar.

Sin embargo, esa llama, lejos de extinguirse definitivamente, lo que ha hecho es adaptarse a los nuevos tiempos, sin la brillantez de antaño, eso sí, pero con la esperanza de que el viento vuelva a soplar otra vez a favor.

Mientras tanto, el CTM Alcoy, que esta temporada tiene como patrocinador principal a la empresa alcoyana Taia SL, trata de mantener esa llama lo más viva posible con cinco equipos, aunque con una cantera que no invita al optimismo, al menos en cuanto a número, con solo cinco componentes, entre niñas y niños, con edades comprendidas entre los 8 y los 14 años, lo que es un motivo de preocupación para los responsables del club.

La bandera del CTM Alcoi sigue siendo su primer equipo, que esta temporada milita en Segunda División Nacional, después de tener que renunciar a seguir en Primera Nacional por los compromisos laborales de Pablo Bernabéu, Arnau Ferrer y Alfredo Gisbert Molina.

Ante esta cuestión, el club tuvo que recurrir a la cantera y que jugadores como Raúl Sanjuán, Pablo Prats o Álvaro Botella, juvenil de primer año, cogieran galones. Las cosas no marchan mal, de momento, y el CTM Alcoy ocupa el tercer puesto de la tabla tras su contundente victoria por 6-0 en la última jornada frente a La Pobla de Valbona.

Los compromisos laborales –Raúl Sanjuán acaba de conseguir plaza como profesor de Educación Física en Ocaña– obliga a tener que hacer verdaderos equilibrios y que el incombustible Alfredo Gisbert Iborra siga en activo o que ocasionalmente tire una mano su hijo, Alfredo Gisbert Molina.

El objetivo del CTM Alcoy no es el ascenso, sino mantener esa posición privilegiada en la tabla, aunque si las cosas siguieran el actual cauce hay opciones de clasificarse para la fase de ascenso, algo que ahora mismo no se piensa.

Un escalón más abajo de la Segunda División Nacional militan otros dos equipos del club, en Super Autonómica o Tercera Nacional, a los que se suman otra plantilla en Primera Autonómica y otra en Segunda. Son cinco equipos para una masa social de 32 jugadores, los cuales no todos tienen ficha federativa, sobre 26 son los que ahora mismo están compitiendo.

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