Más músculo, mayor despliegue

Los fichajes de Antón y de Carrasco, señas de identidad del nuevo Alcoyano

Más músculo, mayor despliegue
Kike Carrasco con el Sanluqueño, en La Rosaleda de Málaga.

La “Operación 14E” ha llevado al Alcoyano a echar atrás la máquina del tiempo. Si los fichajes de jugadores como Sergi García, Campabadal o Monreal, los tres ya fuera del club, representaron entrar en una dimensión desconocida, en busca de la excelencia con jugadores que poco o nada casaban con la filosofía de Vicente Parras, la llegada de Javi Antón y de Kike Carrasco en el mercado invernal supone una especie de regreso al pasado, de recuperar una señas de identidad que en el puzzle diseñado en verano quedaban en un segundo plano, en beneficio de futbolistas más técnicos, más excelsos, pero a los que se hacía complicado encajar con las ideas de un técnico que muchas veces se quedaba en la banda sin capacidad de reacción, porque lo que veía en el campo es lo que se había fichado para el nuevo proyecto, sin trampa ni cartón.

El camino a seguir a partir de entonces estaba claro: tirar hacia adelante y agachar la cabeza, o tratar de rectificar, aunque ello representara una auténtica revolución en el vestuario con el consiguiente daño a unos futbolistas a los que se debía despedir. La solución adoptada fue la segunda, deshacer el camino hecho y volver a los orígenes con Vicente Parras recuperando unos galones que parecía había perdido con las dudas generadas por los malos resultados del equipo.

Los movimientos realizados en el mercado invernal llevan a pensar que el Alcoyano quiere volver al punto donde estaba antes de que llegaran futbolistas como Sergi García, Campabadal o Monreal, jugadores con muy buen pie pero difíciles de acoplar en la cultura del despliegue físico y de dejarse hasta la última gota de sudor sobre el campo que promueve Vicente Parras desde que llegó al banquillo blanquiazul hace cinco temporadas.

Javi Antón, que ya disputó media hora ante el Mérida, necesita poca presentación. En esa línea de futbolista de largo recorrido, polivalente y al que se le queda corto el campo es Kike Carrasco, fichado a mitad de esta semana y que en el At. Sanluqueño, el club donde procede, era uno de los futbolistas más queridos por su despliegue y su derroche físico.

El extremeño, de 25 años, ha fichado por lo que resta de temporada y la siguiente, con lo que será blanquiazul hasta junio de 2025. En un principio hubo confusión porque en la web del Sanluqueño se llegó a publicar que Kike Carrasco venía previo pago de un traspaso, pero lo cierto es que el Alcoyano no ha pagado ninguna cantidad a cambio de su rescisión, sino que el jugador ha condonado un dinero que le adeudaba el club andaluz a cambio de la baja.

Se trata de un carrilero de banda derecha que puede jugar a pierna cambiada en la izquierda. El nuevo blanquiazul ha pasado por los filiales del Extremadura y del Cádiz y tuvo una experiencia en el fútbol valenciano tras jugar una temporada en el Novelda en Tercera División.

LA GUINDA DEL PASTEL
La guinda al pastel de la “Operación 14E” puede ser la cesión de Dani Selma, un 9 nacido en L’Eliana que pasó por la cantera del Levante y clubes como Alboraia y Acero antes de fichar en la temporada 2021/22 por el Tenerife, para reforzar su filial. Los ocho goles que consiguió le abrieron la puerta del primer equipo y la pasada temporada debutó en Segunda División. Este verano fue cedido al San Fernando, con el que ha marcado 3 goles, pero no estaba gozando de minutos. El jugador llegaría cedido por el Tenerife, que le ha ampliado su contrato, y la operación podría cerrarse a comienzos de la semana que viene.

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