Hasta 15 horas al día de color e inspiración

Solbes Arjona ha realizado más de 300 cuadros durante la cuarentena

Taller Solbes Arjona
El resultado de varios meses encerrado en su casa ha hecho que surjan nuevos sentimientos en él | C.Manchón

Con 60 años de trayectoria, Manuel Solbes Arjona sigue creando cuadros. Durante el periodo de reflexión que ha supuesto vivir una cuarentena, este artista ha pintado más de 300 cuadros de diferentes tamaños divididos en varias series como ‘Manchón’, ‘Estética’ o ‘Coronavirus’, entre otras.

Asegura que la inspiración iba apareciendo sola, llegando a trabajar hasta 15 horas al día. Actualmente, lleva más de 700 pinturas desde que empezó la pandemia y argumenta que “no es una obra rápida, es una obra abstracta. Es muy difícil hacer pintura abstracta si no eres abstracto de comportamiento”.

Los materiales que utiliza están hechos a mano. Crea tanto los colores a partir de pigmentos como los lienzos, ya que afirma que los materiales son muy escasos y que en estos momentos no hay tiendas de pintura en Alcoy.

El resultado de varios meses encerrado en su casa ha hecho que surjan nuevos sentimientos en él. “Ya no es la cantidad, sino las horas, la intensidad y el producto que he creado. Este periodo de tiempo ha hecho algo en mí, ha hecho que ponga mucha más pasión a mi trabajo. He estado muchas horas pintando y muchas horas escribiendo”, expresa.

En palabras de Arjona, Alcoy es una ciudad mística. “Hay una conducta artística que alborota a cualquiera. Hay un nivel cultural dentro de las personas y eso es lo que me hace pintar”. Aun así lamenta que sea “una ciudad vampira”, ya que opina que se caracteriza por un “búscate la vida por fuera y después ven a darnos el patrimonio que has conseguido”.

Solbes Arjona se define como hijo de maestros pero cuenta que nunca ha podido estudiar. Esto le ha llevado a ser autodidacta, a desarrollar todas las ideas que tiene en su cabeza en diferentes formatos y expresarlas con letras, pinturas o incluso música. “Eso me ha permitido ser creativo. Las vivencias, museos y rodearse de grandes artistas ha hecho que tenga un currículum muy amplio sin haberlo buscado”.

Todo ese recorrido ha repercutido en muchos escritos, 50 libros, un sainete, una ópera y prosa poética. Su último libro escrito durante la cuarentena se titula ‘Historias venecianas’, pero también ha editado ‘Cuentos niñatos’, un conjunto de historias breves con diferentes temáticas que van cubiertas por una portada única y totalmente diferente.

Cada una de ellas está hecha a mano con acuarelas y técnicas mixtas, siendo cada libro exclusivo y uniendo así sus dos pasiones: la pintura y la escritura. “Mientras pintas el pensamiento sigue funcionando igual, pero cuando escribes, la cabeza solo se dedica a decirte lo que tienes que escribir, por eso me gusta escribir” y concluye: “Hay que tener huevos para seguir escribiendo sabiendo que nadie te lea”.

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