Sin ultimátum y ratificado

Después de lo sucedido el domingo ante el Ebro, con derrota y pañolada tras el partido, pocos daban un duro por la continuidad de Vicente Mir, incluso hasta el propio técnico no era ajeno a pensar que la cuerda podría romperse tras el enésimo traspiés en casa. Sin embargo, pese a lo delicado de la situación con el equipo a tres puntos del descenso y roto el matrimonio entre la grada y el entrenador, el club prefirió no tomar decisiones en caliente y emplazó al técnico a una reunión el miércoles, con toda la Comisión Deportiva presente.

“Hablamos un poco de todo”, desveló el viernes Mir, “de hacer mejor las cosas, pero sobre todo de que en casa hemos de cambiar. Me transmitieron toda su confianza y me demostraron que están conmigo al 200 por cien. En ningún momento hubo un ultimátum. Está claro que las cosas no están funcionando como quisiéramos. La afición tiene todo el derecho a cabrearse como hizo el domingo, es mucho tiempo sin ganar en casa y entiendo su postura”, confesó el técnico, que antes de la rueda de prensa y fuera de micrófonos, pidió disculpas ante los medios de comunicación presentes por su actitud el domingo, después de despedirse con un puñetazo sobre la mesa y con un portazo.

Del momento del equipo, en un tono más sosegado y reflexivo, reconoció que “estamos mal, aunque no tan mal como muchos piensan. Hay equipos que les gustaría estar en nuestra situación, a tres puntos del descenso. El resultado contra el Ebro no fue el esperado, pero hubo cosas positivas en cuanto a garra. Quizás no tuvimos muchas ocasiones, pero fuimos un equipo que buscó la victoria”.
Mir también se refirió al penalti fallado: “En los penaltis dependes de la suerte y nosotros no la estamos teniendo. No es normal lo que nos está pasando, que tengamos cuatro penaltis a nuestro favor y que los cuatro los fallemos, además penaltis que hubieran podido significar puntos. Es lo que fastidia aún más, ahora hemos de pasar página y pensar en ganar en casa del Teruel”.

Después de los dos días de descanso que la plantilla gozó tras ganar en casa del Espanyol B, está semana Vicente Mir ha apretado las tuercas al equipo en busca de mayor intensidad. “Será un partido complicado (hoy a las 17 horas), se han reforzado bien y llevan una buena dinámica de resultados. El Teruel no tiene ni la velocidad ni la juventud del Espanyol B, pero sí más experiencia y son un buen equipo. Espero que seamos un equipo más agresivo y atrevido que contra el Espanyol B. Si somos capaces de hacer una fuerte presión en campo contrario, podemos hacerles mucho daño”.

La última vez que el Alcoyano visitó La Pinilla fue en la temporada 10/11, la del ascenso y con Paco López de entrenador, acabó con derrota por la mínima con un gol a falta de seis minutos. De nuevo, la alineación del equipo estará condicionada por las bajas. Tomás Ruso y Óscar Díaz siguen lesionados y De Lerma y Hermosa se quedarán en casa por sanción. Vicente Mir recupera después de tres partidos en el dique seco a Córcoles, que será títular como lateral derecho, mientras que Fomeyem viajará pero estará en el banquillo. Barreda ocupará la posición de central y Navarro estará en el flanco izquierdo de la zaga. Por primera vez esta temporada, Anaba y Omgba, serán pareja en el doble pivote.

Send this to a friend