Expediente X

Sin su patrocinador principal de las últimas cinco décadas, con su jugador franquicia las tres últimas temporadas marchándose a Italia, sin haber cobrado aún nada de los 85.000 euros que le corresponden en concepto de patrocinio para este curso, con su presidente habiendo anunciado la intención de no presentarse a la reelección y sin saber tampoco la categoría en la que estará el año que viene, hacen del Enrile un exponencial Expediente X con una hoja de ruta llena de incertidumbres que comprometen el futuro de un club en lo más alto de su deporte y con el valor añadido de tener una economía saneada, pero al que el fallecimiento de Lionel Grau, su presidente de honor y mecenas, y el cansancio de Andrés Hernández como capitán de barco, han supuesto dos duros reveses que ponen en entredicho su viabilidad por tratarse de los dos pilares fundamentales en los que se asentó estos años el proyecto que se inició en la temporada 2003/04 con el primer ascenso a la OK Liga.

Ahora mismo, nadie en el club, desde jugadores a entrenador y pasado por el mismo presidente, sabe lo que depararán las próximas semanas. Andrés Hernández mantiene su palabra de bajarse del barco en junio próximo cuando expire su mandato y dejar paso a que se abra una nueva etapa en la entidad azulgrana. “Es bueno y hasta necesario que llegue un presidente nuevo”, esgrime sin tapujos. Pero de la misma manera que tiene claro que sus días al frente del club están contados, dice sentirse atado de pies y manos ante la imposibilidad de convocar una asamblea de socios para hacer balance de la temporada y seguidamente convocar elecciones a la presidencia. El principal impedimento es el convenio de patrocinio que mantiene con el Ayuntamiento y por el cual el Patín Alcodiam percibe en concepto de la marca Alcoy un total de 100.000 euros anuales.

Ese convenio correspondiente a la temporada 2016/17 aún no ha sido firmado, con lo que el club ha ido funcionando hasta la fecha a base de pólizas y préstamos avalados por el propio presidente y alguna firma más a la espera de que ese dinero acabe entrando en la caja del club procedente de las arcas municipales.

Andrés Hernández sí que fue requerido hace unos días al Ayuntamiento para firmar los 15.000 euros que el club percibe por el fomento de la base, pero aún no hay fecha para cobrar los 85.000 euros restantes en concepto de patrocinio que dependen de alcaldía, con lo que ahora mismo no hay fecha para la celebración de la asamblea en la que la actual directiva rinda cuentas y abra proceso electoral tras expirar el actual mandato.

Consciente de que cruzarse de brazos a la espera de ese momento podría traer fatales consecuencias en lo deportivo, de puertas hacia adentro ya se han producido los primeros movimientos para conocer la predisposición tanto de plantilla como de cuerpo técnico para seguir otro año. “La vida sigue y no podíamos quedarnos quietos”, mantiene Andrés Hernández, consciente de que es época de movimientos en el mercado de jugadores. La primera decisión ha sido llegar a un acuerdo verbal con Sergi Punset para que siga siendo el entrenador del equipo, a falta de conseguir esos tres o cuatro puntos que garanticen matemáticamente la permanencia un año más en la OK Liga.

Sergi Punset sigue como técnico

Ello le otorga al técnico de Vilafranca todo el poder en la confección de la nueva plantilla, que pasa por mantener el actual bloque y hacer un par o tres de fichajes. El primer contratiempo con el que se ha encontrado Sergi Punset ha sido saber que después de tres temporadas Ferran Formatjé no seguirá vestido de azulgrana y se marcha a la liga italiana. Como contraprestación, el grueso de la actual plantilla ha dado su visto bueno a seguir en el club.

Es el caso del capitán Pere Cañellas, el portero Guiri y el goleador David Gelmà, que ha sido una de las sorpresas agradables del actual curso. Los tres han dado su palabra de continuar, a falta de rubricar este acuerdo en un contrato. Queda ahora por dilucidar el futuro de los cuatro extranjeros de la plantilla, los argentinos Tutti Baeli y Fran Roca y los portugueses, Tomás Castanheira y Xavier Lourenço. Con los dos primeros, las conversaciones van por buen camino y todo apunta que seguirán, mientras que con los dos jugadores lusos su continuidad está más complicada.

Con estos movimientos, Andrés Hernández pretende que los nuevos gestores no tengan que ocuparse de una de las tareas más complicadas –y más para una directiva novata– como es la confección de una nueva plantilla. Otra tarea en la que se está trabajando de manera seria es la búsqueda de un patrocinador principal y no se descarta que este capítulo también pueda cerrarse satisfactoriamente en las próximas semanas.

Send this to a friend