Juan Serrano exige una reacción
Juan Serrano es actualmente un volcán en erupción a punto de estallar al que le traicionan sus sentimientos por el cargo que ocupa. La última derrota en la Ciudad Deportiva ha venido a poner más sal si cabe a una herida que se abre más cada vez que los de Palop juegan lejos del Collao. Son seis derrotas en nueve salidas que se dejan notar cuando el Alcoyano juega en casa, sin ya margen para más tropiezos.
No llega a ser una situación desesperada, pero más de una alarma ha empezado a dispararse y el presidente demanda una reacción, decepcionado como dice estar con el actual momento del equipo, a cinco puntos de la cuarta posición y con cinco puntos menos que la pasada temporada. “No soy de ultimátums a entrenadores o jugadores, es algo que nunca he hecho”, esgrime el mandatario, que cumple su séptimo curso al frente del club, “pero la situación exige de una reacción inmediata. No podemos seguir por el camino actual y hay que cambiar ya la dinámica actual. Espero más de todos, tanto de jugadores que se han quedado como otros que han llegado nuevos. Sigo manteniendo que es la mejor plantilla que he tenido desde que soy presidente. Sé que diciendo esto lo único que hago es poner más presión al equipo, pero en fútbol dos más dos no son cuatro y de nada sirve tener grandes jugadores si luego no ganas partidos”.
El nombre de Palop aparece en boca de todos y cada vez son más las voces que le señalan como el principal culpable de que el Alcoyano no termine de encontrarse. “Está claro que su suerte será la nuestra. Es un entrenador que se desvive por el equipo y me gustaría que triunfara aquí. Viene de un fútbol que no es el de Segunda B y posiblemente ese peaje le haya pesado en algún momento. No soy quien para enjuiciar a alguien que en este deporte llegó a lo máximo. Sin embargo, el equipo necesita enderezar el rumbo. La temporada pasada tuvimos un técnico que quiso defender sus ideas hasta el final. Fichamos a su gusto en el mercado de invierno y fue un error porque el equipo no reaccionó y tuvimos que echarle con una plantilla a su medida. Esperamos demasiado una reacción y luego ya fue tarde”.
A punto de echar el cierre a 2015, Juan Serrano confía que el nuevo año sirva para cambiar la dinámica tras meses de pocas alegrías. “Me han sucedido cosas”, argumenta, “que nunca antes me habían pasado como una eliminación copera en el Collao o de perder en casa del Espanyol B, un campo donde habíamos logrado una clasificación para un play-off y la pasada temporada el billete para la Copa. A nivel de plantilla también algunos jugadores se han visto afectados por cuestiones personales que han terminado por influir y la suma de todo hace que el equipo no esté rindiendo como esperábamos”.
En opinión del mandatario la mejoría pasa por el gol, “sobre todo lejos del Collao donde nos está costando mucho marcar. El equipo no suma y juega obligado en casa. Es cuando aparece la ansiedad y el balón les empieza a quemar como sucedió en la segunda parte contra el Pobla. La afición tiene toda la razón del mundo para quejarse, soy el primero en estar cabreado por la actual situación, pero el futbolista es también humano y durante el partido hay que apoyarle. En el momento que el árbitro pite el final, que hagan lo que quieran, que aplaudan o silben si hace falta. Tras el partido contra la Pobla bajé al vestuario como hago normalmente y aquello parecía un funeral, daba la sensación que habían perdido y alguno hasta estaba llorando de los nervios. Alfaro se equivocó y luego lo ha reconocido. Le traicionó la tensión del momento”.
Juan Serrano piensa que el gol es cosa de todo el equipo y no una cuestión exclusiva de Yacine y Álex Rubio. “Tanto uno como otro estuvieron muy bien el domingo ante el Espanyol B. Digo esto porque es verdad que podrían llevar más goles, ocasiones han tenido para ello, pero el equipo necesita que aparezcan jugadores de otras líneas, caso de Abraham, Julio de Dios o Javi Rubio, que deben aportar más de lo que han hecho hasta ahora. El domingo solo hubo un disparo desde fuera del área de Carles Salvador cuando entró en el segundo tiempo. Nos falta ser más atrevidos e intentarlo más veces en los partidos. A balón parado solo hemos conseguido un gol y de los centrales únicamente Mario Fuentes ha logrado marcar. Sabemos las carencias que hay y mi responsabilidad será tratar de solucionarlas, no estamos cruzados de brazos en el club y llevamos trabajando en ello desde hace tiempo. Hay algunas cosas vistas y ahora es cuestión de empezar a negociar”, especificó el presidente blanquiazul sin dar nombres, aunque se intuye que el regreso al trabajo de la plantilla a partir de hoy pensando en el partido contra L’Hospitalet será intenso y ciertas cartas aparecen marcadas y boca arriba.